WWDC 2025 marcará un antes y un después en la interfaz de Apple
Apple se prepara para dar un golpe sobre la mesa en su evento más importante del año. Según el periodista especializado Mark Gurman de Bloomberg, la compañía californiana presentará un rediseño de software total bajo el nombre de “Solarium”, una nueva estética que se aplicará a iOS, iPadOS, macOS, tvOS, watchOS y VisionOS. Este cambio no es superficial: representa un intento claro por redefinir la experiencia visual del ecosistema Apple en un momento en que la competencia comienza a lanzar órdagos desde terrenos inesperados.
Lo irónico del nombre Solarium (una habitación llena de ventanas) no ha pasado desapercibido, especialmente viniendo de una empresa que siempre ha presumido de ecosistema cerrado. Pero esta vez, Apple no quiere quedarse mirando el sol desde dentro: quiere volver a marcar la diferencia y plantar cara a una amenaza que no proviene de Samsung ni Google, sino de un dúo que conocían bien la casa: Sam Altman y Jony Ive.
Un rediseño influido por el futuro... y por Vision Pro
Solarium no nace de la nada. Parte de su inspiración viene del diseño de Vision Pro, el visor de realidad mixta que Apple presentó en 2023 y que, pese a su limitado alcance comercial, ha supuesto un hito en cuanto a interacción espacial. Según Gurman, Solarium toma elementos visuales de este producto para introducir un lenguaje de diseño más limpio, moderno y dinámico, que recorra todo el ecosistema y lo prepare para el futuro de las interfaces tridimensionales.
El rediseño llegará este mismo año, con iOS 18 como punta de lanza. No hablamos solo de iconos redondeados o fuentes más finas: hablamos de una evolución visual y funcional que podría redefinir cómo se siente usar un dispositivo Apple.
Este nuevo enfoque gráfico aparece en un momento crítico. Con las ventas de iPhone mostrando síntomas de madurez y una IA que aún no ha cuajado en el producto final, la apuesta por el diseño busca transmitir innovación sin alterar el corazón del negocio. Pero no es una elección voluntaria, sino obligada.
La amenaza silenciosa: Altman e Ive están cocinando algo distinto
Detrás del giro de Apple hay presión. Y no viene de un competidor tradicional. El CEO de OpenAI, Sam Altman, y el legendario exjefe de diseño de Apple, Jony Ive, colaboran en el desarrollo de una nueva familia de productos de inteligencia artificial que busca reemplazar el smartphone tal y como lo conocemos.
Gizmodo, en un análisis detallado, describe esta colaboración como una amenaza elegante. No se trata de competir directamente con Apple, sino de presentar una alternativa radical que haga que el smartphone parezca obsoleto. Y eso, para Apple, es peor que cualquier batalla de specs con Android.
Apple responde con diseño, pero el debate está en el centro del dispositivo
El rediseño Solarium es una declaración de intenciones: Apple quiere demostrar que puede seguir liderando el futuro del hardware sin renunciar a su esencia. Pero el desafío es más profundo. Porque Altman no solo quiere cambiar cómo se ve la tecnología, quiere cambiar cómo se usa. Y en ese terreno, Apple aún no ha dado un paso firme.
Mientras tanto, OpenAI avanza rápido. Según los informes, el dispositivo que desarrollan podría ser más pequeño, más contextual y basado completamente en interacción natural. Un hardware que entiende al usuario sin que éste tenga que pedírselo explícitamente. Apple, por su parte, se enfrenta al dilema de integrar IA real en sus productos sin perder el control de la experiencia de usuario.
La llegada de Solarium puede ser el primer paso en esa dirección. Pero no será suficiente. No basta con una nueva piel, cuando otros están diseñando órganos completamente nuevos.
Una WWDC crucial: ¿vuelve Apple a marcar el paso?
La WWDC 2025 será mucho más que una presentación de sistemas operativos. Será una declaración de principios. Solarium llega en el momento exacto para ofrecer aire fresco a una interfaz que, si bien sigue siendo la más pulida del mercado, necesita reinventarse para no volverse irrelevante ante lo que viene.
La pregunta que queda en el aire es clara: ¿está Apple liderando esta nueva era o está reaccionando a ella? ¿Será Solarium una respuesta brillante o un simple intento de seguir pareciendo innovadora mientras otros están redefiniendo la partida?
Una cosa está clara: el rediseño no es casual, ni ligero. Es estratégico. Es Apple recordándonos que aún sabe jugar en las grandes ligas. Pero también es, en parte, un movimiento defensivo ante una visión distinta del futuro, una que no necesita pantalla ni táctil, solo inteligencia y contexto. Y esa, por ahora, no es su casa.
